Tras unas semanas en las que diversos indicios parecían señalar el inicio definitivo de la recuperación, con la recaída de nuestra economía en la recesión, han regresado todas las incertidumbres.
Más allá de los aciertos o errores del nuevo Gobierno en cada una de las reformas que viene desarrollando, las razones de esta recaída se enraízan en cuestiones de fondo, muchas de ellas de ámbito europeo, que no se han abordado de manera suficiente.
Precisamente, estas cuestiones de fondo centraban nuestra última Opinión de Actualidad “A tiempo de salir del túnel. La hora de la política”. En dicha Opinión advertíamos de la necesidad de acompasar las políticas de ajuste fiscal con aquéllas a favor del crecimiento, y todo ello en el marco de una profundización en la política económica y fiscal común de la eurozona. En los meses transcurridos desde entonces, vemos como el número de países de la Unión Europea que entran en recesión va en aumento. Mientras el resto del mundo crece, los europeos perseveramos en la austeridad como principal, cuando no única, estrategia para salir de la crisis.