El pasado mes de marzo, una veintena de instituciones representativas del tejido económico y empresarial catalán -Consell General de Cambres de Catalunya, Foment, PIMEC, FemCAT, el Col·legi d’Economistes de Catalunya, el RACC, Barcelona Global y el Cercle d’Economia- emitimos un comunicado reclamando una reforma ambiciosa del sistema de financiación territorial basada en los principios de transparencia, equidad y eficiencia, en un marco de lealtad institucional. Las instituciones signatarias del comunicado denunciábamos que el actual sistema de financiación autonómica frena el progreso económico de muchas comunidades autónomas como Cataluña, y proponíamos corregir la situación a través de un nuevo modelo de financiación.
Hay que tener muy presente la urgencia de resolver esta situación, en las que se acumulan los déficits de financiación con consecuencias que consideramos muy negativas sobre el potencial de progreso económico y el bienestar social del país. Hay que aprovechar el momento para encontrar y pactar soluciones, entendiendo que la concreción de un nuevo modelo corresponde a las fuerzas políticas legitimadas por la ciudadanía.
El comunicado de marzo se limitaba a especificar algunos elementos básicos, que en opinión de las entidades debería tener este nuevo modelo: asegurar la autonomía financiera, mejorar la capacidad de gestión y recaudación tributaria, y garantizar el principio de ordinalidad, así como tener en cuenta el diferencial del coste de la vida entre comunidades.
Nos consta que hay una negociación en curso entre los partidos de cara a un posible pacto de investidura que incluiría una mejora del sistema de financiación para Cataluña. Las entidades firmantes nos congratulamos de este hecho, deseamos que estas negociaciones lleguen a buen puerto, y que representen un avance efectivo por la financiación del país, en la línea apuntada en el anterior comunicado.
Es fundamental que las principales fuerzas políticas, tanto en Cataluña como en el conjunto del Estado, progresen hacia una cultura del pacto que permita alcanzar grandes acuerdos de país para todos aquellos temas básicos que requieren de grandes consensos para poder ser finalmente aplicables y, sobre todo, duraderos en el tiempo. También es fundamental que los pactos se cumplan y se respete siempre el espíritu que inspiró el acuerdo inicial. Si el acuerdo finalmente se alcanza, las 20 instituciones signatarias permaneceremos atentos a que los contenidos de lo acordado se respeten por todas las partes.
Finalmente, y suponiendo que se llegue a un acuerdo político en este ámbito, las 20 instituciones signatarias de este comunicado pedimos al resto de fuerzas políticas que lo valoren en profundidad, y consideren apoyarle.