Un día antes de Sant Jordi, el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha presentado en el Cercle d’Economia su libro "Crónica de la España que dialoga", el testimonio en primera persona de Rodríguez Zapatero sobre cómo se han afrontado los grandes conflictos sociales y políticos de las últimas décadas en España y en el mundo.
El libro es resultado de las largas charlas que José Luis Rodríguez Zapatero ha mantenido con el periodista y escritor Màrius Carol sobre las grandes crisis que ha tenido que resolver a lo largo de su amplia vida política desde el final de la banda terrorista ETA hasta la crisis de Venezuela, el conflicto catalán, las tensas relaciones con Estados Unidos cuando era presidente, la guerra de Ucrania o el momento crítico que vive la construcción europea. El expresidente del Gobierno ofrece su visión sobre cómo cualquier desacuerdo, por muy grave que sea, se puede resolver, a corto o largo plazo, a través de la mejor herramienta que tiene la humanidad: el diálogo.
En un debate con el periodista y escritor Màrius Carol y la directora adjunta de La Vanguardia Lola García, José Luis Rodríguez Zapatero ha hablado de los resultados de las elecciones en Euskadi, de las próximas elecciones en Cataluña, de política exterior europea y de mucho más.
En relación a los comicios vascos, Zapatero ha asegurado que el resultado supone "la reválida de un modelo de gobierno" del PNV con el PSE y cree que "el electorado ha reforzado a los socialistas". "Es significativo. Creo que el entendimiento y la transversalidad en sociedades muy plurales y diversas es un modelo a tener en cuenta", ha añadido. También ha destacado que el PSOE está "muy contento" tras las elecciones vascas y que "es un buen aperitivo para las elecciones en Cataluña". Preguntado sobre el hecho de que el candidato de EH Bildu no definiera a ETA como grupo terrorista, Zapatero ha recordado que "tuvo que pedir perdón" porque le supuso un problema y también ha dicho que le gustaría que Bildu "diera algún paso más" en este sentido. También ha comentado que "el final de ETA fue el final de un drama terrible sin drama, un final por desistimiento y convencimiento político" y ha añadido que "representa la puesta en valor de la importancia del diálogo y de la paciencia infinita para conseguir la convivencia". José Luis Rodríguez Zapatero se ha sincerado explicando que "mi principal objetivo antes de llegar al gobierno era acabar con la violencia de ETA y tenía la intuición de que era posible" y, en este sentido, ha destacado que "el Rey emérito siempre lo apoyó". "El Rey emérito era un gran político con una gran intuición política", ha añadido.
Por otro lado, el expresidente del Gobierno ha afirmado que el acuerdo de investidura de Pedro Sánchez tras las elecciones generales del 23 de julio "es de largo alcance y debe trascender cualquier resultado electoral que se produzca en Cataluña en las elecciones del 12 de mayo". Según Zapatero, "la sentencia del Estatuto supuso una ruptura emocional que cuesta que se entienda en una parte de la política española" y ha añadido que "necesitaremos que pase un tiempo equivalente al que duró la gestación del proceso para superarlo". Zapatero ha recordado que "siempre he estado a favor de los indultos y de la amnistía, antes, durante y después de la investidura". "No creo en el derecho penal para solucionar conflictos políticos", ha subrayado.
En el debate en el Cercle d’Economia, José Luis Rodríguez Zapatero también ha hablado de memoria histórica y ha destacado que "el hecho fundacional de mi trayectoria personal y política es la figura de mi abuelo".
El expresidente del Gobierno también ha hablado de la Unión Europea y le ha instado a "reflexionar sobre su autonomía política" y a "no subarrendar su política exterior a la de Estados Unidos porque será un fracaso". Zapatero ha asegurado que Europa no debe armarse más: "Siempre que lancemos una carrera armamentista habrá más guerras y más poder de la industria militar". "Lo que se debe hacer es invertir más en política, cooperación exterior y desarrollo y recuperar las capacidades político-diplomáticas. Otra cosa nos llevaría a una crisis mucho más grave de la que tenemos ahora", ha alertado.
Zapatero se ha definido como "incompatible radicalmente con cualquier violencia" y ha apuntado literalmente a una "crisis muy profunda" si vuelve la tendencia de utilizar la guerra como arma en relaciones exteriores.
En cuanto a la guerra en Gaza, ha asegurado que llegará un momento en el que habrá una revisión histórica y profunda cuando las instituciones internacionales, las ONG y los tribunales internacionales puedan evaluar lo que está pasando: "Esto pondrá en crisis a la sociedad occidental y, por supuesto, a la israelí".